Pionero maulino de la aviación nacional
Pionero en la aviación chilena. Emilio Castro nació el año 1888 en el fundo San Gabriel, en los alrededores de San Clemente.
Realizó ejercicios en conjunto con otros pioneros del país como Clodomiro Figueroa, David Fuentes, Luis Omar Page, incluso con los hermanos César y Felipe Copetta.
En 1910, cuando tenía 22 años, decidió viajar a Francia impulsado por la idea de estudiar profesionalmente la carrera de la aviación. Una vez allá, se decidió por ingresar a la escuela del famoso ingeniero y aviador Louis Bleriot (conocido por cruzar por primera vez el Canal de la Mancha en 1909). En aquella escuela fue compañero de otro chileno, el pionero y teniente Amadeo Casarino.
En septiembre de 1913 rindió su examen frente a una comisión del Aereo Club de Francia, obteniendo su licencia de piloto. Celebró las fiestas patrias chilenas en París y emprendió rumbo hacia Argentina, donde estuvo unos días acompañado por su amigo Alberto Feller, y posterior a eso, continuó su viaje a Chile, arribando a Chile en el mes de noviembre.
Una vez en su tierra natal, le compró a Clodomiro Figueroa el famoso avión “Lautaro” por veinte mil pesos, construido con restos de diferentes aviones.
Con esta nueva adquisición, Emilio se dirigió a Talca, donde recibió la atención de la muchedumbre y la prensa. La idea era difundir y extender el conocimiento de la aviación, por lo que Emilio comenzó una serie de giras por el sur y el norte del país.
Clodomiro Figueroa y Emilio Castro se presentaron en mayo de 1914 para realizar maniobras en el actual Parque O´Higgins de Santiago.
Posteriormente, Emilio se dirigió hacia Coquimbo, La Serena, Ovalle y Mejillones. El 26 de julio de 1914, Castro se encontraba nuevamente con Figueroa en Antofagasta, donde también realizaron maniobras en conjunto. Luego de eso, Emilio continuó realizando demostraciones en el norte hasta agosto, momento en que regresa a San Clemente para continuar luciéndose en las zonas de Talca y Linares.
Emilio Castro y Clodomiro Figuera continuaron realizando demostraciones de sus vuelos, y el 20 de diciembre de 1914 volaron en Lautaro. La zona del sur del Biobío era un territorio aún muy rural, y sin lugar a dudas, para los habitantes de esas localidades, el avistamiento causó más impresión que en otros sectores. Esta actividad, además, no era azarosa, Emilio deseaba bautizar su avión “Lautaro” en el pueblo que lleva el mismo nombre. Invitó a los lugareños a tripular la máquina, pero sólo se atrevió Manuel Iturriaga.
El historiador Jorge Valderrama en una de sus publicaciones señala que en octubre de 1920, y producto de la situación conflictiva que se vivía con Perú, fue requerido como oficial de reserva. La situación finalmente encontró una solución no bélica.
En el año 1954, Guillermo Donoso Vergara presentó una moción para nombrar a Emilio Castro como Capitán de Bandada, y lo consiguió. Años después, Emilio fue nombrado Coronel Honoris Causa por la FACH.
Se casó con Clorinda Alcaíno y tuvieron una hija llamada Antonieta. Emilio Castro tenías más facetas, fue secretario municipal de San Clemente, y miembro fundador además de la Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos de su ciudad.
Falleció el 16 de agosto de 1974 a los 86 años, como producto de una larga enfermedad. El aeródromo de Panguilemo lleva su nombre como homenaje.