Origen del nombre: en homenaje al Abate Juan Ignacio Molina
Fundación: 28 de noviembre de 1834
Población: 40.239 habitantes.
Extensión: 1.552 km2.
Uno de los primeros actos administrativos para la fundación de un poblado, es la creación de la doctrina, ya sea capilla, vice parroquia o parroquia propiamente tal.
De tal forma que, el Obispo Alday mandó erigir, en 1767, la Parroquia de Peteroa, a petición de los vecinos del lugar, desde donde la sede parroquial pasó a Lontué y de aquí a Molina en 1837. El templo fue dedicado a Nuestra Señora del Tránsito y Santa Rosa de Lontué.
Desde 1826 ocurren varios actos legales que determinan la fundación de Molina. En primer lugar está la ley del 30 de agosto de 1826 donde el Presidente Blanco Encalada dividió al país en ocho provincias, en la cual la de Maule iba desde el río Maule al Ñuble, jurisdicción que tendría por capital Cauquenes.
En 1834 doña María del Tránsito de la Cruz, sobrina del Conde del Maule y quien siempre se declaró partidaria del rey, ofreció los terrenos necesarios para fundar una villa dadas las condiciones de ubicación que Lontué no poseía. Para ello, con la venia de su esposo Josè Antonio Rosales, ofreció el predio al Intendente de Talca Francisco Josè Bustamante. Enviado el expediente al Presidente Josè Joaquín Prieto, este aceptó la oferta por decreto del 28 de noviembre de 1834, fundándose la villa con esa fecha. El nombre de Molina, fue en homenaje al abate Juan Ignacio Molina.
Un año después, el 23 de octubre de 1835, se crea el Departamento de Lontué, expresando este cuerpo legal que la nueva jurisdicción tendrá por cabecera y residencia de las autoridades departamentales, a la villa de Molina.
En opinión de algunos textos que hemos consultado, consideran a este acto como la fecha de fundación de la comuna de Molina, pero la ley no lo dice.
Diversos decretos gubernamentales fueron dotando de servicios a la nueva villa, la cual recibió el título de ciudad por Decreto del 7 de noviembre de 1873.
La primera vez que se menciona la comuna de Molina, en un documento oficial es el DFL 8583 del 30 de diciembre de 1927, donde se establece que el Departamento de Lontué, “comprenderá las comunas de Molina y Valdivia de Lontué”, y a la vez define las subdelegaciones que integraran la jurisdicción municipal de Molina, que son Molina, Huerta y Rio Claro.
Molina se caracteriza por contar con grandes centros de producción vitivinícola, como las viñas San Pedro, Concha & Toro, Tarapacá, etc. además de producción de manzanas, peras y kiwis de exportación.
En el aspecto turístico, destaca el famoso Parque Nacional Radal Siete Tazas, al interior de la precordillera.
De los numerosos periódicos fundados, destacase uno de larga duración, “El Lontué”, que circuló desde el 13 de diciembre de 1878 al 17 de julio de 1881, con una segunda etapa que abarcó desde enero de 1895 a diciembre de 1997.
En la guerra de la independencia, la hacienda de Quechereguas fue escenario, el 8 de abril de 1814, de un combate entre las fuerzas del jefe realista Gabino Gainza y las huestes patriotas, a las órdenes de Bernardo O’Higgins, que terminó con la derrota de los españoles.
En Molina nació el 7 de agosto de 1866 Luis Cruz Martínez, cuya partida de bautismo fue encontrada en 1980, revelándose que su padre fue el agricultor Severo de la Cruz Vergara y su madre Clodomira Franco Martínez. El mas tarde Subteniente De la Cruz Martínez se cubrió de heroísmo en la batalla de La Concepción.
Hijo de Molina es el sacerdote y poeta Luis Felipe Contardo Palma, (Molina 1880- Chillan 1922), escritor destacado, autor de una poesía sagrada muy notable. Fue Gobernador Eclesiástico de Chillán, dirigió dos periódicos de Concepción y ejerció como Profesor del Seminario de esa ciudad. Su libro más importante, “Cantos del Camino” (1918).
Existe un libro sobre el pasado de Molina, que se debe al esfuerzo de don Nelson Chávez Díaz publicado en el 2009, con el título de “Antecedentes Para la Historia del Departamento de Lontué y la Villa de Molina”.